El 25 de mayo, los ciudadanos españoles tenemos la oportunidad de elegir a quienes serán nuestros representantes en el Parlamento Europeo. Una cita importante para el medio ambiente, pues la mayoría de las decisiones a este nivel provienen de normativa europea.
En muchas ocasiones el Medio Ambiente es una preocupación secundaria en las agendas políticas, y es posible que no nos planteemos la importancia de votar pensando en este tema. Sin embargo, las decisiones en materia ambiental no solo se refieren a la conservación de especies amenazadas, también afectan de forma directa a muchos aspectos de nuestra vida: la calidad del aire que respiramos y del agua que bebemos, la forma de movilidad que se fomenta en las ciudades en las que nos desplazamos y la configuración de nuestra factura de luz dependen de las políticas de medio ambiente. En estos tiempos en los que el desempleo es, desgraciadamente, la principal preocupación de la mayoría de los ciudadanos, muchas voces piden el fomento de políticas que impulsen el empleo verde y formas de desarrollo alternativas al “ladrillazo” que hemos vivido en las últimas décadas, capaces de generar puestos de trabajo de calidad y con vistas al futuro.
Según WWF, el 80% de la legislación ambiental se decide en el ámbito de la Unión Europea, y debido a ello, los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo serán determinantes en materia de medio ambiente. Con motivo de las elecciones europeas, la organización ha impulsado un manifiesto con los objetivos medioambientales que cree que los representantes políticos deberían promocionar en Europa.
Estas son algunas de las cuestiones pendientes que la Eurocámara tendrá que resolver durante la próxima legislatura:
Energía y clima para 2030
El Parlamento Europeo quiere reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40% respecto a los niveles de 1990 y establecer un objetivo vinculante del 27% en cuanto al uso de energías renovables.
Comercio de Emisiones
se realizará una revisión del Sistema Europeo de Comercio de Emisiones de cara a afrontar el próximo periodo, que comenzará en 2021.
Emisión de contaminantes
La Eurocámara deberá establecer los niveles máximos de emisión de determinados contaminantes, como las pequeñas partículas insalubres, y establecer un techo de emisión para las plantas de combustión.
Programas electorales y propuestas en materia medioambiental Elecciones europeas 2014
Para poder completar esta información, la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (APIA) organizó un debate en el que participaron las cinco mayores organizaciones ambientales de España: Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF y representantes de PP, PSOE, IU y Equo. Puedes ver el vídeo entero en su página web.
Por otro lado, dado que, por un lado los programas electorales suelen ser vagos y poco concretos en muchas materias, y en demasiadas ocasiones los representantes elegidos no cumplen todo lo expresado en los programas, WWF ha elaborado una tabla de puntos basada en el comportamiento de voto de los eurodiputados de cada partido durante el periodo 2009 – 2014.
Aunque el análisis de los programas electorales da para un debate muy amplio y se podría analizar minuciosamente para extraer todos los detalles, hemos hecho un “barrido general” de las propuestas de los diferentes partidos en Medio Ambiente para las elecciones del 25 de mayo.
Partido Popular (PP)
El programa electoral del Partido Popular dedica 5 páginas al medio ambiente, que se incluyen dentro de un apartado más amplio que trata otros temas relacionados: agricultura, pesca, transporte y turismo. Las 10 propuestas son bastante generales, sin concretar, y se recalca el impulso de campañas de concienciación al ciudadano. Aboga por la penalización económica de las actividades contaminantes y por la creación de bancos de hábitat, un concepto similar al de los bonos de carbono que aún no está desarrollado en España. Se trata de dar créditos a los particulares que lleven a cabo una actuación de conservación y así se puedan compensar otras actuaciones con impacto ambiental. También expone la intención de prestar más atención a la preservación de los fondos marinos y de la lucha contra la expansión de especies exóticas.
La energía es tratada en una sección diferente de 3 páginas. Este partido no se decanta por unas fuentes de energía frente a otras, sino que se apuesta por un mix energético que contemple todas las opciones disponibles, haciendo hincapié en garantizar la seguridad en el suministro de energía. En ningún momento hace referencia al fomento del autoconsumo, es decir, la producción de energía por parte de particulares que instalan, por ejemplo, una placa solar en sus hogares. Apenas se nombra a las energías renovables ni se proponen políticas concretas para impulsar su desarrollo. La expresión “movilidad sostenible” no aparece en el documento.
El programa del PSOE incluye 25 propuestas bastante escuetas, dos de ellas relacionadas con el medio ambiente: por un lado, compromiso de disminución de la pobreza energética, y por otro, oposición rotunda al fracking.
Por otro lado, publica el Manifiesto de Roma, firmado por el Partido Socialista Europeo (PSE), que incluye un apartado llamado “Una Europa Verde” con propuestas muy generales en materia de Medio Ambiente. Habla del fomento de las energías renovables y no aparecen propuestas concretas en ningún ámbito, tan solo la promoción “de la aplicación de bonos de proyectos para financiar las buenas inversiones en economía verde”.
Dedica un apartado de 14 páginas a medio ambiente, dentro del cual considera la energía, y contempla secciones concretas sobre derechos de los animales y biodiversidad, este último bastante extenso.
Además de abogar por la inclusión de los costes ambientales en la actividad productiva, da un paso más allá y propone el desarrollo de leyes para “garantizar que no se produzca la contaminación, persiguiendo penalmente y no solo económicamente a los culpables”.
Incluye la ordenación del territorio dentro del apartado dedicado al medio ambiente, y articula propuestas bastantes generales que buscan la promoción de un desarrollo más justo y sostenible. Menciona la importancia de mantener corredores ecológicos para garantizar la conservación de ecosistemas, un concepto que no aparece en los programas electorales de otros partidos. En cuanto al transporte, dedica un pequeño apartado a la bicicleta (palabra que no se menciona en ningún apartado de los programas electorales de PSOE, PP y UPD). Sin embargo, solo se refiere a la mejora de las infraestructuras ciclistas y no a otro tipo de acciones para la promoción de la movilidad en bicicleta.
En el ámbito energético, IU propone la regulación del sector energético desde un Consorcio Europeo. Menciona la protección de la salud pública frente a la exposición a las radiaciones electromagnéticas emitidas por las instalaciones de generación y transporte de energía eléctrica. Propone un aumento de las energías renovables de al menos un 25% para el 2020, el cierre de las centrales nucleares y se opone al fracking y las prospecciones petrolíferas en las costas europeas.
Dedica 3 páginas a medio ambiente y energía, siendo este último apartado el más extenso. Propone un mercado europeo de energía para “mejorar la igualdad de condiciones en la competencia industrial” y un modelo energético que tenga en cuenta todas las fuentes posibles, sean renovables o no. No se opone al fracking, pero dedica un extenso apartado en el que expone la necesidad de regular dicha actividad. También apuesta por el fomento de las renovables y la promoción del autoconsumo energético.
En el resto de temas relacionados con el medio ambiente el programa es muy escueto, con enunciados vagos y generales. Al igual que otros partidos, hace referencia a la necesidad de internalizar los costes reales de los impactos medioambientales.
Equo
Dedica 14 páginas al apartado de medio ambiente, en el que incluye también agricultura y pesca. En cuento a la energía, propone el fomento de la energía de origen renovable hasta al menos el 45%. Propone un plan de retirada del mercado europeo de productos de baja eficiencia energética. Hace referencia al fomento del autoconsumo y propone la articulación de microrredes de distribución municipales que serán apoyadas con un sistema de incentivos. Se opone al fracking y a las nuevas prospecciones petrolíferas. Pide también el cierre progresivo de centrales nucleares y la prohibición de abrir nuevas minas de uranio.
Habla de movilidad sostenible, de impulso a los vehículos híbridos y eléctricos (conceptos que no se mencionan en los programas electorales de PSOE, UPD e IU, pero sí en el del PP). Respecto a la bicicleta, propone la mejora de infraestructuras y la incorporación de otras medidas como el IVA reducido para la compra y reparación de bicis, o la facilidad para transportar la bicicleta en otros medios como el ferrocarril. Al igual que IU, dedica un extenso apartado a las medidas para la conservación de labiodiversidad en Europa.
Fuente: geo