jueves, 16 de octubre de 2014

Se pide al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) transparencia, que no siga alimentando el "baile de cifras" y que haga pública la información de la superficie real cultivada con transgénicos en el Estado español

EL GOBIERNO NOS "ENGAÑA" SOBRE LA SUPERFICIE REAL CULTIVADA CON TRANSGÉNICOS

Un año más, Greenpeace ha solicitado a las Comunidades autónomas información sobre la superficie cultivada con transgénicos en 2014 para poder contrastar la información real con las estimaciones del MAGRAMA que se acaban de publicar. Una vez más, se constata una diferencia sustancial a la baja respecto a la información aportada por el Ministerio.

Amigos de la Tierra, la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Ecologistas en Acción, Greenpeace y Red de Semillas denuncian que las cifras oficiales de cultivos de transgénicos en el Estado Español no son las reales. Estas organizaciones acusan al Gobierno de ofrecer públicamente unas cifras que no corresponden a la realidad y que, en algunos casos, llegan a tener una diferencia del 100% respecto a las proporcionadas por las Comunidades Autónomas. Ante esta incongruencia de datos, piden al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) transparencia, que no siga alimentando el "baile de cifras" y que haga pública la información de la superficie real cultivada con transgénicos en el Estado español. 

Un año más, Greenpeace ha solicitado a las Comunidades autónomas información sobre la superficie cultivada con transgénicos en 2014 para poder contrastar la información real con las estimaciones del MAGRAMA que se acaban de publicar. Una vez más, se constata una diferencia sustancial a la baja respecto a la información aportada por el Ministerio.

Aunque muchas CC. AA. no han contestado, aquellas donde más se siembran transgénicos sí han enviado la información solicitada, lo que ha permitido confirmar de nuevo que la superficie cultivada con transgénicos en el Estado Español es muy inferior a la estimada por el MAGRAMA, una constante en los años que se lleva haciendo este trabajo. 


Comparativa entre superficie estimada y real cultivada con maíz MON810 en el Estado español (2014) - en hectáreas

ARAGÓN: estimación MAGRAMA, 54.040,50; información CC.AA., 32.074; diferencia, 21.966,50; porcentaje de diferencia, 40,65%.

CATALUÑA: estimación MAGRAMA, 36.381,22; información CC.AA., 22.309,69; diferencia, 14.071,53; porcentaje de diferencia, 38,68% .

EXTREMADURA: estimación MAGRAMA, 13.814,76; información CC.AA., 7.127,20; diferencia, 6.687,56; porcentaje de diferencia, 48,41%.

CASTILLA Y LEÓN: estimación MAGRAMA, 17,65; información CC.AA., 0; diferencia, 17,65; porcentaje de diferencia, 100%.

Destacan los casos de Cantabria y Castilla León, que han contestado que no se han sembrado transgénicos, y el caso de Canarias, cuya respuesta ha sido que desde 2008 no se cultivaban organismos modificados genéticamente, además de haberse declarado Zona Libre de Transgénicos.

En el otro extremo, muchas CC. AA. siguen sin responder a sus obligaciones legales y no han contestado a las solicitudes de información ambiental. Este es el caso de Andalucía, Castilla La Mancha, Comunidad de Madrid, Islas Baleares, La Rioja, Región de Murcia, País Vasco, Galicia, Cantabria o algunas que han contestado pero sin aportar la información solicitada; es la situación de la Comunidad Foral de Navarra, Comunidad Valenciana o el Principado de Asturias.

En el Estado español, la administración sigue haciendo oídos sordos al rechazo de la ciudadanía por los cultivos transgénicos y a la mayoría de los agricultores que continúan apostando por una agricultura sin este tipo de variedades, aunque la administración y la industria sigan queriendo mostrar una imagen distinta.

Amigos de la Tierra, Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Ecologistas en Acción, Greenpeace y Red de Semillas piden la prohibición del cultivo de transgénicos en el Estado Español porque suponen graves riesgos, no son necesarios y no presentan mejores rendimientos que las variedades convencionales. Sin embargo, mientras se siembren, la opinión pública tiene derecho a conocer la realidad de estos cultivos y no meras estimaciones.


Fuente original: ecoticias