España ocupa el octavo lugar en eficiencia energética a nivel mundial aunque se sitúa en el último puesto de los países de la UE estudiados, según el informe 'International Energy Efficiency Scorecard' del Consejo Americano por una Economía Eficiente en Energía (ACEEE, en sus siglas en inglés).
El informe ha analizado la trayectoria en materia de eficiencia energética en 16 economías avanzadas del mundo y ha elegido a Alemania como la más eficiente con una puntuación de 65 sobre 100. Le siguen Italia (64 sobre 100), la UE en su conjunto (63 sobre 100), China (61 sobre 100), Francia (61 sobre 100), Japón (57 sobre 100) y Reino Unido (57 sobre 100).
España, que ha sido incluida por primera vez, ha obtenido una puntuación total de 54 sobre 100 puntos que se desgrana en cuatro categorías de 25 puntos cada una. En primer lugar, "Esfuerzos nacionales", que mide aspectos de la estrategia energética de un país y en el que España obtiene 13 sobre 25 puntos, la novena posición.
En segundo lugar, en la categoría "Edificación", que aborda la eficiencia de las construcciones tanto residenciales como comerciales, el informe cifra en 25.741 las toneladas equivalentes de petróleo (tep) de energía gastada y otorga a España 15 sobre 25 puntos, empatando en la quinta posición con Australia y Canadá.
En tercer lugar, España iguala en la sexta posición a Francia, Japón y Corea del Sur con una puntuación de 12 sobre 25 en la categoría "Industria", que estudia la intensidad del consumo energético y las medidas para reducirlo en el sector industrial. En este sentido, el informe añade que el consumo para 2013 fue de 20.489 tep.
En cuarto y último lugar, en la categoría "Transporte", España consumió 32.050 tep durante 2013 y recibe del estudio una puntuación de 14 sobre 25, ocupando la quinta posición junto con Brasil, China y Francia.
España debe mejorar en transportes
Además, el trabajo destaca de España aspectos positivos como la eficiencia energética de sus centrales térmicas (la segunda a nivel mundial) o el "éxito" de los esfuerzos nacionales hacia el objetivo de una reducción del consumo energético del 20 por ciento previsto en la Directiva Europea de Eficiencia Energética.
Sin embargo, los autores advierten a España de que, aunque su puntuación es alta, en la categoría "Transportes" debe mejorar en áreas como el consumo de energía en transporte de mercancías por carretera o la puesta en marcha de campañas que fomenten el uso del transporte público.
La investigadora de ACEEE y principal autora del estudio, Rachel Young, ha destacado que "los países que utilizan la energía de manera más eficiente emplean menos recursos para conseguir los mismos objetivos, por lo que se reducen costes, se preservan recursos naturales y se obtiene una ventaja competitiva respecto a otros países".
Fuente original: ecoticias